Para que un tanque funcione a su eficiencia energética óptima, es importante que los tubos estén limpios. Si hay depósitos o cal, la energía necesaria para operar la unidad aumenta para mantener las tasas de transferencia de calor requeridas. Cuando se forman depósitos, la eficiencia de transferencia de calor disminuirá y las paredes de los tubos pueden dañarse. Uno de los métodos más comunes para limpiar los enfriadores, condensadores y otros intercambiadores de calor son los limpiadores de tubos rotatorios. Con varios estilos de cepillo para elegir, los limpiadores de tubos rotatorios pueden quitar una variedad de depósitos. Para obtener los mejores resultados de limpieza, es importante medir adecuadamente el tamaño del cepillo de acuerdo con el estilo del cepillo y el depósito que se quiere eliminar.

Cal en pequeñas cantidades

Para quitar cal en pequeñas cantidades, un cepillo turbo puede ser la mejor solución. Disponible en varios perfiles de cepillo, un cepillo turbo es único debido a las partículas de carburo de silicio integradas en sus cerdas. Al seleccionar un cepillo turbo, es importante seleccionar un cepillo un poco más grande en diámetro que el diámetro interno del tubo para maximizar la acción de limpieza. Elegir un tamaño de cepillo ligeramente mayor que el diámetro interno del tubo permite que las partículas de carburo de silicio en las cerdas estén completamente en contacto con una superficie mayor de la pared del tubo. Esta característica única mejora la capacidad de limpieza del cepillo Turbo.

Cal en cantidades medianas

Para eliminar los depósitos de cal medianos de un tubo, se recomienda el uso de una herramienta desincrustante utilizada junto con un cepillo rotatorio. La herramienta desincrustante eliminará la mayor parte del depósito del tubo, lo que permitirá que un cepillo pase luego. A continuación, el cepillo quitará las partículas de depósito leve restantes y pulirá el interior del tubo. Si intenta limpiar este tipo de depósito con un cepillo solo, puede encontrar obstrucciones de depósito y no poder pasar a través del tubo. Es importante eliminar primero un depósito pesado con una herramienta desincrustante seguida por un cepillo para asegurar que el tubo alcance un nivel óptimo de rendimiento de transferencia de calor.

Depósitos de lodo

En los casos de depósitos de lodo leves, un cepillo de nailon sería la mejor solución. Mientras que el cepillo turbo tiene que ser de un tamaño más grande que el diámetro interno del tubo, un cepillo de nailon debe tener un tamaño tan cerca del diámetro interno del tubo como sea posible. Esto se debe a que la eficacia del cepillo de nailon está en la acción de las puntas de las cerdas que pasan a través del diámetro interno del tubo. Si el cepillo es muy grande, las puntas de las cerdas se plegarán, evitando que el cepillo limpie la pared del tubo correctamente.

En general, los limpiadores de tubos rotatorios son un método bueno y económico para limpiar los enfriadores, condensadores y otros tipos de intercambiadores de calor. La determinación del tipo de depósito en los tubos es fundamental para lograr la máxima capacidad de limpieza del cepillo rotatorio. Una vez que se determina el tipo de depósito, será fácil seleccionar los cepillos necesarios para el trabajo. Ciertos estilos de cepillos tienen requisitos específicos para lograr resultados óptimos. Seguir estos consejos y trucos le ayudará a recuperar eficiencias de transferencia de calor “como nuevo” cuando utiliza un limpiador de tubo giratorio.

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